Violoncello y clarinete no es una formación
muy usual en cámara.
Pero es que nosotros no somos muy usuales.
Somo atípicos y algo atópicos también.
Tenemos la carita como esos niños
que son propensos a las alergias.
Somos gente normal que
nos gusta el buen reír, el buen comer
y el buen dormir.
Somos lo que somos y por eso nos queremos
Que no dejemos de componer
melodías a nuestro gusto..
Feliz día!
:)